Las mentiras en las entrevistas de trabajo
Empresas, los reclutadores y los candidatos …todos mentimos en las entrevistas de trabajo. Dejémoslo claro desde el principio.
En este artículo haré un repaso de todas las mentiras que nos contamos unos y otros, ya verás que risa de post 😛
Mentiras en las entrevistas de trabajo
El candidato
Maquillar el curriculum
Siempre nos dicen los portales de empleo, los reclutadores y los gurús de RRHH que hay que adaptar el curriculum a las ofertas de trabajo en las que estamos interesados presentarnos.
Que levante la mano el que no haya maquillado su curriculum para que quede chulo y que capte la atención del reclutador:
- Pones una foto de la primera comunión para que piense que eres menor de 25 años
- Detallas todos los títulos académicos, incluidos el de crochet y el de macramé
- Eres políglota, aunque en realidad hablas solo español y te sabes 4 palabrotas en inglés
- Escribes todos los sitios donde has trabajado para que vean que tienes 18 mil años de experiencia, aunque no tenga nada que ver con el puesto de la oferta de trabajo.
Luego empiezas a enviarlo a diestro y siniestro. De repente un día te llaman. Ay, qué alegría.
La entrevista
Acudes a la cita y allí te enfrentas a test psicotécnicos, test de grafología, pruebas de nivel de conocimiento de aplicaciones informáticas o de idiomas … porque, claro, las empresas buscan siempre al mejor candidato, al que tiene más talento Por eso, hacen las mismas pruebas que las que hace la NASA para reclutar astronautas.
Las preguntas son de todo tipo. Desde tu trayectoria profesional hasta las de índole personal que son ilegales, pero da igual, las hacen.
¿Estás soltero, por qué?
¿Tienes pareja?
¿Te vas a casar, pretendes irte de luna de miel?
¿Estás casado, qué tal lo llevas?
¿Estás divorciado, por qué? ¿fuiste infiel a tu pareja?
¿Tienes hijos o lo quieres tener, cuántos, por qué?
¿Pretendes llevarlos tú al cole y llegar tarde a trabajar? ¿Con quién se quedarán mientras estás trabajando?
Una pregunta típica es:
– ¿por qué quieres cambiar de trabajo?
Evidentemente no puedes decir que estás en una mierda de empresa, que te explotan o que el sueldo no te da para pagar las facturas.
Como hablar mal de la empresa anterior es muy feo. Respuesta:
– Tengo un contrato temporal. Se me acaba el día X
La empresa
Al igual que tu maquillaste tu curriculum, las empresas también adornan todo.
En la entrevista
1. Empresa líder en su sector
… y tú te quedas pensando: «pues no había oído su nombre hasta que eché el curriculum», «¿gran empresa? pero si me acaba de decir que son 20 en plantilla»
Dime de qué presumes y te diré de qué careces
2. Posibilidades de desarrollo
La segunda mentira es decir que el puesto tiene muchas posibilidades de desarrollo.
Significa harás lo mismo hasta que te jubiles o hasta que te den la patada en el culo hasta que te dejen ir.
3. Sueldo
A pesar de que es un tema tabú, en algún momento tiene que hablarse de ello.
– El salario inicial es algo bajo, pero nos comprometemos a actualizarlo según tu valía y compromiso dentro de unos meses
Esto significa que te vas a quedar con el mismo sueldo hasta que te jubiles. Tal y como está la cosa, lo que tienes que agradecer eternamente que te contraten.
Debo informarte que tú eres la única persona del mundo mundial que trabaja por dinero. Todos los demás trabajamos solo por tener nuevas y motivadoras responsabilidades en un entorno laboral de felicidad y transformación digital.
📌 Lectura recomendada: ¿Por qué cada empleado tiene un sueldo diferente?
4. Beneficios sociales
– Cuando pases el periodo de prueba, empezarás a disfrutar de beneficios para empleados como descuentos en gimnasios y un pase gratis mensual para ir al spa a que te hagan un masaje en la espalda.
Sin embargo, cuando pasen los 18 meses de contratos temporales y consigas tu contrato indefinido, casualmente habrán caducado todos esos acuerdos que la empresa tenía pactado con el spa, el gimnasio o la cafetería de la esquina.
Peor aún, ellos nunca dijeron nada al respecto en la entrevista, debiste entender mal.
5. Horario laboral
El horario es de 8 a 5 aunque debes tener disponibilidad total.
¿Disponibilidad total? ¿no habías dicho que de 8 a 5? ¿En qué quedamos?
Disponibilidad total significa que te tocará trabajar hasta las 9 de la noche y no te pagarán las horas extras.
Es posible que vayan de modernos y te vendan la moto del teletrabajo. ¡¡Uff!! Miedo me da. Eso es el equivalente a trabajar 24-7-365.
📌 Lecturas recomendadas: El timo del teletrabajo// Las trabacaciones
6. Te llamaremos
No me digas que esto no es un clasicazo.
¿Cuántas veces te han dicho al terminar una entrevista que te llamarán o que se pondrán en contacto contigo?
Esta es la trola de las trolas. La peor de todas y la que tiene consecuencias muy graves para el reclutador y la empresa en cuestión.
📌 Lectura recomendada: el silencio del reclutador
Anécdota
Te contaré una anécdota sufrida en mis propias carnes.
Fui a hacer una entrevista en una empresa, cuyas oficinas centrales estaban en un buen barrio de Madrid y las instalaciones eran la pera limonera. Amplias, modernas, funcionales y limpias.
Sin embargo, en la entrevista me dijeron que mi centro de trabajo iba a estar en otro sitio. No me importó. De hecho, me alegré porque estaba al lado de mi casa. Eran unos 20 minutos andando.
El primer día de trabajo se me cayó el alma a los pies en cuanto entré en aquel lugar. Aquello era un sótano:
- no había ventanas
- no había aire acondicionado aunque tampoco hacía falta debido a que estábamos bajo tierra y siempre hacía fresquito.
- Tampoco había calefacción y en invierno pasamos un frío del carajo.
El servicio de apenas un metro y medio cuadrado y mucho moho. Cuando te sentabas te dabas con la cabeza en el lavabo.
Calculo que la oficina tendría como mucho tendría 50 metros cuadrados. Era peor que un taller ilegal de chinos.
Éramos 6 personas contratadas por nuestros conocimientos en idiomas. Había una francesa, un italiano, un inglés, una holandesa, una medio alemana (yo) y una española. Aquello parecía la ONU.
Nos pasábamos el día llamando a empresas para venderles el producto que fabricaba la empresa.
Una vez conseguido un cliente, había que hacer toda la gestión del pedido, la facturación y seguimiento del pago.
Al final del día había que mandar el listado de empresas contactadas por email a la coordinadora, quien casualmente estaba en las oficinas centrales.
Un lunes al abrir la puerta y entrar, pisé algo y sonó crack. Miré mi zapato. Tenía una cucaracha aplastada en la suela ¡aargg!
Aquello fue el comienzo de una plaga. En un par de días había cucarachas por todas partes.
Ibas andando por la oficina y notabas cómo se te quedaban pegados los «cadáveres» en las suelas de los zapatos. Ese sonido al pisarlas …
O cuando estabas sentado en tu mesa y de repente pasaba una correteando entre los papeles y el teclado del ordenador.
Asqueroso no, lo siguiente. Me dan náuseas con solo recordarlo.
Llamamos a los jefes. Pero no nos hicieron caso porque pensaban que estábamos exagerando. Siempre nos estábamos quejando por la mierda de oficina en donde nos tenían metidos trabajando en la “clandestinidad”.
Pasados los días y después de dar mucho el coñazo, el de RRHH se dignó a ir y comprobar lo que estaba pasando.
Al ver el panorama, se comprometió a llamar a una empresa anti-plagas para que fumigaran.
Al día siguiente, mientras estábamos trabajando, apareció por allí un grupo de tíos vestidos en plan caza-fantasmas. Nos quedamos alucinados.
Iban a fumigar con nosotros dentro. ¡Increíble!
Entonces la francesa llamó por teléfono a los jefes:
– Han venido unos señores …
– Sí, son los anti-plagas. Van a fumigar. Vosotros seguid trabajando ¿eh? Que no pasa nada.
– ¿Cómo?
– Que no os vayáis a casa. Continuad con vuestras tareas.
Cogimos nuestros efectos personales y salimos a la calle. Allí, en la acera, hicimos nuestro propio consejo de seguridad de la ONU 🙂
– Estas cosas en Francia no pasan. ¿Hacemos huelga?
– En Italia también tenemos cucarachas, pero no son tan grandes como estas.
– Nunca vi cucarachas mientras vivía en Alemania, aunque hay garrapatas como diplodocus en la Selva Negra.
– En Holanda no hay oficinas tan cutres como esta. Aun no les he contado a mis padres cómo es el sitio dónde trabajo porque me da vergüenza
– ¿Votaciones a favor de irnos a casa? – dijo el inglés
¡Todos a favor!
Entonces la holandesa sacó el móvil y llamó al de RRHH para informarle la resolución:
– Hemos decidido irnos a casa. No queremos intoxicarnos. Regresaremos en unos días.
Respondió:
– Si mañana no regresáis, seréis despedidos por abandono de puesto de trabajo.
Ninguno regresó.
¿Quién piensas que miente más en las entrevistas de trabajo? ¿RRHH o los candidatos?
¿te engañó alguna empresa alguna vez como a mi?
¿has maquillado tu curriculum?
¿algún candidato te ha metido gol?
Holden
19 junio, 2015 @ 19:34
Alucino pepinillos con lo de querer fumigar con vosotros dentro… madre mía que cutrez y que bajeza de sitios. Quienes promueven que existan ese tipo de situaciones merecen pena de muerte. Jefes… ¡cómo los odio!
Pedro Fabelo
19 junio, 2015 @ 19:35
Vaya, lo de la cucaracha, aún a sabiendas de que se trata de una foto, sigue dando repelús. Y digo yo, ¿no serían vuestros jefes disfrazados que merodeaban por esa mini oficina para expiaros? Lo digo porque es fácil confundirlos. De hecho, yo muchas veces no he sabido distinguir a los unos de las otras. Y sólo como dato anecdótico: al pisarlos -a los jefes, digo- suenan igual que cuando pisas una cucaracha. ¡Crach! Por algo será… 😛
Un abrazo, Erika. Y feliz finde. ; )
Carlos Girón
19 junio, 2015 @ 19:35
Jajajaja Erika tiene remedios para todo. Me encantó ese truco del fax. Por otro lado… ¡cucarachaaaaaaaa! Ah, no. Qué susto. Es el amigo Gregorio que viene a contar sus profundos problemas vitales. Déjame contarle tu historia que así le saco una sonrisa. ¡Un abrazo!
Sil
19 junio, 2015 @ 19:35
En un trabajo horrendo en el que sólo estuve 4 meses, al jefe "se le olvidó" decirme en la entrevista que se trabajaba de lunes a sábado. Me enteré de esto cuando al segundo lunes RRHH me llamó para preguntarme qué no había ido el sábado.
En otro trabajo horrendo tenía que intentar recuperar antiguos clientes de la empresa que estaban en Estados Unidos. Uno de mis trucos cuando no tenía ganas de hablar era simular que no se escuchaba bien. Estaba "Hello? Hello?" un rato y después cortaba.
Erika Martin
19 junio, 2015 @ 19:49
Qué olvido más tonto tuvo tu jefe ¿no? un detallito sin importancia. Sil ¿dónde ibas a estar un sábado mejor que en el trabajo?
jajjaja ese truco se lo hago yo a mi jefe cuando está de viaje. Hay días que se pone muy pesado llamándome cada 5 minutos. Así que le digo que no se le escucha bien (¿qué? ¿como? ¿qué dices? ¿estás ahí?) y acto seguido le cuelgo jijiji
¡Buen finde!
Erika Martin
19 junio, 2015 @ 19:55
Hola Carlos, espero que ya estés mejor.
El truco del fax es infalible, te lo prometo. Y lo de la cucaracha ¡¡puaj!! Lo que me extraña es que en zulo como ese no hubiera también chinches. Claro, cuéntaselo a Gregorio, a ver si se ríe un poquito.
Un gran abrazo
Erika Martin
19 junio, 2015 @ 19:57
Seguramente eran ellos disfrazados para controlarnos más de cerca jaja Pedro, yo tampoco los distingo muy bien de ellas.
Llevaba toda la semana pensando en cómo es la onomatopeya de pisar una cucaracha y mira, la has escrito tu en un pis pas
Un abrazo y disfruta el finde
Erika Martin
19 junio, 2015 @ 20:00
fue indignante que quisieran fumigar con nosotros dentro y que encima dijeran que no pasaba nada y que siguiéramos trabajando.
Se ganan a pulso que les odiemos, Holden. A ver si un día nos toca la lotería para decirles "ahí te quedas con tu mierda de empresa" jejeje
Mirta Cristina
19 junio, 2015 @ 22:18
Que locura querer fumigar con gente, ahora que se ve a lo lejos causa mucha gracia!!La próxima vez
hay que llamar algún canal de noticias, que se ponen contentos!! Que tengas un hermoso y soleado fin de semana! Besazo
Erika Martin
19 junio, 2015 @ 22:40
Espero que no haya próxima vez, Mirta jaja pero si fuera así, llamaré a todas las cadenas de televisión jajaj
Muchas gracias, guapa. te deseo un maravilloso fin de semana. Besazos!!
Holden
20 junio, 2015 @ 06:05
También hay jefes buenos, ya te digo. Yo cuando funde mi propia multinacional voy a ser querido por todos, como otro gran empresario que conquistó europa (con sus productos) y eso que ni era capitalista, un tal Hitler.
Marigem Saldelapuro
20 junio, 2015 @ 06:05
Jajajaja, me parto!!!!! Lo de la fumigación es surrealista de cabo a rabo, y el consejo de la ONU en plana calle brutal. Un besín y e he reído mucho.
Erika Martin
20 junio, 2015 @ 06:17
Pero vamos a ver, si hasta con los botes de insecticida mata-moscas recomiendan que te vayas de casa media hora y que ventiles bien las estancias ¿cómo nos íbamos a quedar allí con los caza-fantasmas? :O
Gracias por tu tiempo y tus risas, guapa.
Un besazo
Erika Martin
20 junio, 2015 @ 06:26
Posiblemente haya jefes buenos, Holden. En 20 años que llevo trabajando no he conocido a ninguno pero seguro que los hay 😛
Si te vuelves un empresario de ese tipo no sé si te van a querer tus empleados aunque se acordarán de ti, tu familia y todos tus muertos cada día cuando vayan a trabajar a tus órdenes. Dirás buenos días y responderán ¡¡#&%$Z^*!!
Hilaida
20 junio, 2015 @ 08:11
Este tema está genial Erika. Recuerdo siempre cuando iba a entrevistas de trabajo (ya ahora no lo hago)… En la noche anterior soñaba haciendo la entrevista y las preguntas que me hacían. Luego en la mañana siguiente me ponía mi mejor percha y me iba de lo más contenta. Siempre me pasaba que en la entrevista veía el ambiente donde estaba y evaluaba si me gustaría estar trabajando allí. Donde me daba mayor feeling allí finalmente era donde era contratada.. Un fuerte abrazo amiga.. me alegra que todo vaya de lo mejor
ramrock
20 junio, 2015 @ 12:14
Uuuuuuffff… menos mal que yo siempre he sido un vulgar oficinista, es decir, o administrativo o auxiliar, de comercial y telefonista nada de nada, es mas, recuerdo que una vez preferí aceptar un trabajo de reparto de publicidad por buzones sin contrato a uno de tele-operador.
Hay trabajos para los que uno no sirve y punto.
Eso si, en las entrevistas siempre me he mostrado en plan mas bien "servil", "¿porque dejé mi anterior trabajo?, despido improcedente o se me acabo el contrato", "¿Sueldo?" lo que diga el convenio" y así siempre.
Y me salté dos huelgas, la que le hicieron a Felipe Gonzalez y la de Aznar (en esta última es cuando estuve de contratado laboral interino (suplencia por enfermedad) en el Ministerio de Hacienda y un día, al ir a entrar, casi me lincha un piquete porque, encima, me puse chulo y se me ocurrió decir "la huega es un derecho pero no una obligación y yo trabajo cuando me sale de los c….).
Jejejejee, desde luego, está claro que de los curreles se pueden sacar buenos post, lo que pasa es que yo no soy buen escritor.
Lovely weekeend.
Carlos Dearma
20 junio, 2015 @ 12:37
La trampa del FAX me encanto: Me gusta eso de los empleados timando a la gran empresa. Fue genial lo de renunciar masivamente al trabajo por las cucharachas. Muy buen post, me he educado sobre cosas que no conocía. Besines amiga
Alexandra Proaño
20 junio, 2015 @ 17:53
Hola Erika!
Lo de las cucarachas (vivas) y arañas (fosilizadas) me pasó en la universidad, cuando estuve un verano de becaria en el despacho de mi decano. Fue casi casi tal cual te pasó. Tiene la oficina en una casa enorme en una zona que está muy bien. 2 plantas, un patio interior precioso (escultura y espejo de agua incluidos), muebles de diseño, revistas de arquitectura por todos lados. Vamos, una casa en la modernista en la que ya me gustaría vivir. ¿Detalle? Los trabajadores (y la pringada de la becaria) teníamos los tableros de dibujo en el parking del sótano. Allí en el inframundo, donde las cucarachas paseaban a sus anchas y las arañas se habían muerto (literalmente) del asco para quedarse a decorar las paredes hasta el infinito y más allá.
¿Limpiaron? ¿Fumigaron? ¡Para qué! El cachondeo fue un día que llegó su esposa y, cuando entró a saludar, se encontró con ese panorama. Puso a los dos chicos que trabajaban allí a limpiar mientras ella conversaba conmigo sobre lo linda que era la vida en la universidad. Al final llegó mi decano y puso el grito en el cielo.
– "¡¡¡Pero como los pones a limpiar si yo no les pago por eso!!!"
– "¡¡¡El problema es que no le pagas a nadie para que limpie este agujero!!! ¿Que va a decir tu alumna? ¿Qué van a decir de ti si se enteran de esto en la universidad???"
Y así por un rato más. Al final le importaba un carajo que estuviéramos rodeados de bichos, lo fundamental era que yo no me fuera de la lengua y se enteraran mis amigos en la facultad. Por suerte fueron sólo los 3 meses de verano y luego mi vida volvió a la normalidad.
¡Besos Erika!
Chelo
20 junio, 2015 @ 17:53
Qué mona Erika con sus perlas al lado del cubo y la fregona, ¡me parto con tus imágenes!
De verdad, hay empresas en las que todo vale, pero mira, al final la unión hace la fuerza.
Yo trabajé muchos años en un juzgado, y todo lo más que habitaba, entre tanto expediente, eran los tpicos bichillos que van al papel,; los odiaba porque me daban/dan un poco de repelús, imagínate, es que no soy muy de bichos 😉
¡No quiero, pues, ni imaginar si hubieran sido cucarachas!
¡Besos, y feliz fin de semana!
RAQUEL ORTIZ
20 junio, 2015 @ 17:53
Hola Erika, no me ha gustado nada, jajaj, esa "cuca.." de imagen , uff me dan pánico no puedo verlas ni en pintura, jejeej, pues que te voy a contar que no hayas contado ya aquí, desde que empecé a buscar trabajo, cuando aun estaba estudiando, me di cuenta de lo estrictos que son algunos jefes, estudiaba 1er curso de la rama de Administración, me llamaron de una empresa y en la misma entrevista el contable me hizo una prueba examen de Contabilidad, ahí me dí cuenta de la importancia de la sinceridad en tu entrevista y que era todo muy serio y estricto, entonces no se llevaban los cv., veias o te enterabas de una oferta ,llamabas por teléfono y al día siguiente tenías la entrevista, lo que pasa es que aquello era una captación de personas para hacer cursos en un centro de formación, imagínate, después de los nervios de la entrevista, el éxamen, me llaman de una academia de parte de la empresa diciendo que si quería trabajar ahí tenía que hacer primeramente un curso de pago que costaba muchísimo.
Otras veces ha ocurrido, que sí te lo pintan bonito, sin problemas, te van a pagar todas las horas que hagas cuando sea temporada de campaña, te hablan del buen equipo de trabajo que hay y después es todo lo contrario.
Y más experiencias que no terminaría de contar….
Muy buena entrada, feliz fide!!!
Daniel Madrid
20 junio, 2015 @ 18:33
jajajajaja muy bueno tu post Erika!! me he sentido muy identificado con las mentiras de las empresas, luego se va descubriendo todo y en los hoteles no es menos eh? parece que todos se creen The Ritz o Savoy aquí en Londres 😀 y hay hoteles que parece que tienen las paredes de cartón y nada por menos de 100 libras la noche. Feliz finde amiga!
Marisa Doménech
20 junio, 2015 @ 18:33
No sé si es más difícil conseguir un trabajo después de pasar una entrevista de esas de astronauta de la NASA o que te llamen del INEM directamente, como le ocurrió a mi hermana. En cualquier caso, está demostrado que encontrar un trabajo puede ser la repera, o también el infierno de Dante, jajaja. Cucarachas a mí…Con el asco que me dan no hubiese aguantado ni cinco minutos :s Pero no solo eso, lo de fumigar estando dentro los compañeros y uno mismo es de película, ¡imagino que os acordarías de sus madres, jeje 😉
Pero bueno, las anécdotas del post son curiosísimas y graciosas, ahora que forman parte del pasado, jajaja. Me ha encantado Erika. Como siempre, es muy gratificante leerte.
Besos y feliz finde
Humoreo Luego Río
20 junio, 2015 @ 18:33
¡¡¡Alucino en colores!!! ¿Querían fumigar con vosotros dentro? ¡¡¡Que locura!!!
Los productos fitosanitários de fumigar, pueden producir desde una simple urticaria, a una fuerte intoxicación. Por otro lado, no entiendo como podíais estar con esas cucarachas, rondando pir vuestras mesas. ¡¡¡Yo las odio!!!
Que buen abanico de trucos, tienes para todo.
Eres una gran y resolutiva secretaria.
Me lo he pasado genial co la historia.
Un fuerte abrazo.
Erika Martin
20 junio, 2015 @ 19:25
Hola Hilaida,
te entiendo perfectamente, a mi también me han dado nervios e insomnio cuando he tenido entrevista en alguna empresa en la que realmente tenía interés por trabajar.
Como dices es el momento perfecto para observar cómo es la empresa. Siempre me he fijado en los empleados (en sus caras y gestos) para intentar adivinar si estaban contentos o quemados 😉
Me alegro mucho de que fueses contratada en donde había mayor feeling pero más aún que ya no necesites hacer entrevistas.
Un abrazo muy muy fuerte, amiguita 🙂
Erika Martin
20 junio, 2015 @ 19:52
Hola Antonio,
lo que pasa es que incluso para ser reponedor de supermercado te hacen pruebas de selección de esas raras que comento arriba. Pero tienes razón, hay trabajos para los que uno vale y para los que no.
¿El sueldo que marque el convenio? yo siempre he pedido el acorde a mi experiencia laboral y conocimientos y el mercado. En una ocasión fui a una entrevista en una conocidísima empresa de coches alemanes. Me ofrecían 12 mil euros (más o menos lo del convenio). Se acabó la entrevista. El sueldo medio de una secretaria en una multinacional son 30 mil euros y las senior pueden incluso doblarlo.
Vaya experiencia tuviste con los piquetes. Muy buena la respuesta que les diste. Se ponen muy zopencos y se olvidan de que no todos están de acuerdo con sus reivindicaciones o simplemente no pueden permitirse que les descuenten un día en la nómina.
Nunca he hecho huelga. Si quiero algo intento negociarlo directamente con mi jefe. Si no llegamos a un acuerdo, entonces la hago a mi manera. Pej ¿que quiere ir en business en los aviones? pues le pongo en el gallinero en la ultima fila jejeje
Animate a escribir un post sobre curreles, seguro que lo haces muy bien.
Lovely weekend!!
Erika Martin
20 junio, 2015 @ 20:00
Hola Carlos,
la trampa del fax también se puede reinventar para otros trabajos. Pej si tu jefe te pide llamar a alguien con el que no tienes ganas de hablar. Puedes decir en tono indignado que no conseguiste contactarle porque tenía el teléfono desviado al fax, en vez de a un contestador. Este truco lo uso de vez en cuando jeje.
Mil gracias por tus palabras y por tu tiempo.
Besotes y muy buen fin de semana
Erika Martin
20 junio, 2015 @ 20:04
Vaya tela con el decano. Muebles comprados en las tiendas chulas que publicas en tu blog y luego cucarachas y arañas en el sótano. Y encima preocupado por su reputación. Increíble, Alexandra.
Podías haberle hecho chantaje y haberte sacado un dinerito extra jajaja es broma.
Menos mal que solo fueron 3 meses!
¡Besos!
Erika Martin
20 junio, 2015 @ 20:09
jajaja es que no me quito las perlas ni muerta, soy muy coqueta ¿qué le vamos a hacer?
Siempre que salen los juzgados en la tele pienso ¿cómo pueden trabajar con tanta montaña de papel al rededor? los que no sabía es que también hay bichitos ¡¡aarrgg!! Mejor no te intentes imaginar si hubieran sido cucarachas.
Besos y muy feliz fin de semana, Chelo
Erika Martin
20 junio, 2015 @ 20:19
Hola Raquel,
lo malo de poner cosas falsas en el curriculum es que luego si te hacen alguna prueba, te pueden pillar. Bueno, supongo que por eso las hacen.
Lo de pagar por un trabajo es un fraude ¿lo sabes, no?
Estos días busqué en internet respecto al tema y me llamó la atención que apenas hay info sobre cómo mienten las empresas en los procesos de selección. Prácticamente todo es sobre lo poco éticos que son los candidatos. Qué injusto.
Oye ¿y porque no cuentas todas esas experiencias en tu blog? seguro que le sería de mucha ayuda a mucha gente 😉
¡¡Enhorabuena por tu 2º Aniversario, Raquel!! ¡buen trabajo!
Muchos besos
Erika Martin
20 junio, 2015 @ 20:24
Hola Juan Carlos,
me lo vas a decir a mi que hasta un simple mata-moscas me provoca un ataque de asma. Imagínate qué hubiera pasado si me hubiera quedado allí dentro a que me fumigaran a mi también como si fuera un gusano. Es que hay cosas que no se pueden tolerar.
jejej es que son muchos años trabajando ya, por eso tengo tantos trucos 😉
Muchas gracias por tu tiempo, sé que andas un poco escaso de él últimamente.
Un abrazo muy fuerte.
Erika Martin
20 junio, 2015 @ 20:42
Aahh ¿pero llaman del INEM? me has dejado de piedra, Marisa, las posibilidades de que eso ocurra deben ser una entre un millón. Al final buscar trabajo es otro trabajo.
No te imaginas los gritos que pegábamos en la oficina a cuenta de las cucarachas ¡¡qué asco!! Con la fumigación nos hicieron sentir como si estuviéramos en un país asiático de esos donde las condiciones laborales simplemente no existen.
Pero bueno la historia quedó en el recuerdo y escribiéndola me he acordado de las risas que nos echábamos de pura impotencia mis compañeros y yo en aquellos momentos.
Gracias por contar la historia de tu hermana y por tu opinión. Y gracias una y mi veces por estar aquí una semana más.
Besos y muy feliz finde
Erika Martin
20 junio, 2015 @ 20:47
Hola Daniel,
Lo de los hoteles londinenses es terrible. Echas un vistazo a sus webs y las descripciones y los precios son como las del Savoy. Luego ves las fotos y te dan ganas de llorar con esa decoración eduardiana con moqueta y moho incluido. Si es que a pesar de la distancia te llega el olor a rancio jajaja
Pero en el que tu estás no es así ¿no? bueno no contestes si no quieres 😉
Happy weekend, my friend!
Consciencia y Vida Magazine
21 junio, 2015 @ 07:29
Se nos han puesto los pelos como escarpias cuando leíamos este nuevo capítulo…¡Qué antros de oficinas hay en Madrid XD!
Afortunadamente no tenemos experiencias así tan cutres, porque lo de las cucarachas ya es lo que faltaba y encima con exigencias de trabajo por parte de RRHH… Como la unión hace la fuerza, así vosotros también ganasteis ese pulso.
Por supuesto el truco para no hacer llamadas de prospección es muy efectivo, aunque el oído tiene que aguantar el molesto pitido y no resulta fácil.
A relajarte en tu sofá todo el finde y a disfrutarlo!! Muchos besotes 🙂
Hilda Hurtado
21 junio, 2015 @ 07:28
Hola mi querida Erika, he andado desaparecida jejej pero ya regrese. Me he matado de risa con lo de los "cadáveres " pegados a la suela de tu zapato. Me imagino a las cucarachas haciendo de las suyas sobre los papeles y el ordenador jajajaja. Muy desagradable el sótano en el que estaban, pero muy bien que salieron antes que entraran en ataque los casafantasmas . Tienes razón en decir que las mentiritas blancas ayudan al currículum, en sí opino que uno debe decir la verdad pero maquillarla para una noche de gala, así luce espectacular jajajjaja. Besos y abrazos desde NY, sabes que aunque ande media perdida, siempre regreso para ponerme al día con los chismes de la oficina.
Marisa Doménech
21 junio, 2015 @ 07:30
Bueno, la citaron por carta para que se presentase a trabajar como traductora de valenciano, ¡¡se quedó flipada!!, imagínate cómo era la cosa.
Tú ya sabes que soy una incondicional tuya, ¡¡yo por Erika y su blog ¡¡MATOOOO!!, jajaja
Besos otra vez
Erika Martin
21 junio, 2015 @ 08:07
Uno piensa que en la capital de un país del primer mundo no pueden ocurrir estas cosas y ya ves … al final no le queda a uno más remedio que dimitir, más que nada por tu propia salud que es lo más importante de todo.
En cuanto al truco, el pitido es ensordecedor por eso hay que bajar primero el volumen de tu teléfono. En muchas ocasiones es mejor quedarse medio sordo que que te insulten al otro lado del teléfono 🙂 Con un poco de práctica jajaj te terminas acostumbrando al pitido.
No veas la traca que le estoy dando al sofá este finde. Ayer me eché una siesta de 3 horas y hoy creo que voy a hacer lo mismo jejeje
Disfrutad el domingo a tope y cargad las pilas para la semana que empieza.
Muchos besotes
Erika Martin
21 junio, 2015 @ 08:19
Hola Hilda,
me encanta cómo has expresado lo de las mentiras piadosas en el curriculum: maquillarlo para lucir espectacular en una noche de gala. Es genial la comparación y solo podía expresarlo así una chica tan glamurosa como tu.
Imagino que en NY no hay sótanos con cucarachas y cazafantamas ¿no? jajaj espero que no.
No te disculpes por la falta de tiempo, mi querida amiga. Sé que te gustan más mis chismes que los de Betty la Fea jajaja así tu tranquila, pásate cuando puedas/quieras.
En cualquier caso, millones de gracias por tus visitas.
Un beso muy grande va cruzando el charco rumbo a la Gran Manzana, muuuaaack
Fantasía Y Realidad
21 junio, 2015 @ 13:26
Bueno Erika,ni te imaginas lo bien que me lo paso mientras te leo porque me encanta tu forma de escribir y describir situaciones.Eres de lo mas graciosa y divertida y no me extraña nada que te quiera tanta gente y entre ellas,yo por supuesto!!.
Muchos besos niña:)
Ricardo Mazzoccone
21 junio, 2015 @ 17:23
Hola Erika.
Genial como siempre. Lo de la experiencia es exacto: a veces se buscan jovenes con 10 de experiencia ¿? Uno lee jovenes y se imagina gente de entre 20 y 25/6 años. ¿Como hacen, comienzan a trabajar a los 14?
Todos en nuestros comienzos hemos tenido trabajos con condiciones lamentables. Me recordaste mi primer trabajo en Buenos Aires, venía de Mar del Plata y un día cualquiera entré y en mi escritorio, bah, una mesa, y encontré una araña pollito, si parecía mas un pollo que una araña. Con mis compañeros la guardamos en un frasco grande y le dábamos de comer todos los días.
En fin.
Beso.
Hilda Hurtado
21 junio, 2015 @ 17:24
Erika, acá también hay sótanos con cucarachas y más… Gente sin escrúpulos no sólo utilizan los sótanos como oficinas clandestinas, si no hasta como consultorios médicos clandestinos. Hace un mes más o menos vi un reportaje en el noticiero que me erizó la piel, una mujer de unos 30 años más o menos , murió debido a que le inyectaron una sustancia en los glúteos , la mujer en cuestión había viajado de otra ciudad para someterse a un tratamiento para agrandarse la cola, el problema es que el consultorio clandestino estaba en el sótano de una casa y el supuesto doctor, cuando vio que la mujer comenzó a quejarse y a dejar de respirar, salió huyendo en su auto y cuando los paramédicos llegaron ya fue demasiado tarde. Me apeno mucho la noticia, porque por vanidad, la mujer no le importó exponer su vida y mira como término. Aunque nunca entendí por que no fue a un hospital o clínica, de seguro le cobraban mucho más, pero no se hubiera expuesto de tal manera.
Paula Koval
21 junio, 2015 @ 17:24
The worst lie that I ever heard from an employer came after the interview, and it was not told to me. The boss was not about to appoint a manager for our operation because he was too cheap and he kept all of the power to himself. He took a guy who was an OK person, educated and capable, and appointed him the "focal point" of the operation. After several weeks in this position, this guy took such crap with no power to stop it that we called him the "fecal point." The whole thing was more like the boss's experiment in social engineering than an organizational structure. What a mess!
Cindy Groulx
21 junio, 2015 @ 17:24
Trabajar en lugares con cucarachas es nada nuevo, que ellos también tienen aquí en Canadá. Yo podría haber clasificado unos jefes como cucarachas también.
Boy yo Estoy feliz de que saliste de ese trabajo, trabajar durante 9 horas sin horas extras? Sólo por el privilegio de trabajar para ellos. Qué privilegio? la alimentación de la cucarachas? Wow hay algunos jefes encabezados hinchadas ahí que debería haber sido colgado por la ventana por los tirantes. Pero eso habría sido difícil de hacer desde un sótano sin ventanas.
Gracias por compartir la historia de Erika
Les deseo una gran semana.
Si voy a España espero que haya muchos bandera, mástiles colgando de edificios altos para colgar todos esos jefes con las cabezas hinchadas por sus tirantes
La Luz
21 junio, 2015 @ 17:24
En nuestro trabajo, el propio resultado del mismo es un detector de mentiras, de manera que no hacemos tantas preguntas en la entrevista. Le damos un contrato temporal por lo general de un año y si sirve queda dentro y si no queda en "libertad"
Erika Martin
21 junio, 2015 @ 19:56
no sabía que también hay cucarachas en Canadá pero, bueno, ellas están por todas partes. En aquel trabajo también había unas dos patas y se llaman jefes jajaja Tenían que haber fumigado el sótano con ellos dentro ?
Un beso muy grande y disfruta mucho el mini-viaje con Paula
Erika Martin
21 junio, 2015 @ 18:32
Hola Ricardo,
no sé cómo hacen los jóvenes para empezar a trabajar a los 14 años. Eso es explotación infantil. Si es que a los reclutadores se les va mucho la cabeza, por pedir que no quede pero hay cosas imposibles jaja
¿Tuvisteis de mascota una araña pollito? ¡Ay, dios! pero si son como tarántulas ¿no? y encima se hacen muy grandes … esos pelitos por sus patitas y el cuerpo redondito … ¡uff! no puedo con las arañas. Cuando veo una me la cargo de un zapatillazo. No lo puedo evitar, me ponen muy nerviosa.
Gracias por compartir tu historia. Veo que contigo las arañas están a salvo jaja
Besos y muy buena tarde de domingo
Erika Martin
21 junio, 2015 @ 19:41
Hola Teresa, me pongo tan contenta cuando me dices esas cosas. Me siento muy afortunada por tu apoyo y tu gran amistad. Muchísimas gracias.
Muchos besos, guapa
Erika Martin
21 junio, 2015 @ 19:44
Hacéis fenomenal en vuestro trabajo ¿Para qué perder el tiempo en preguntas y tests? Si en un año eres incapaz de demostrar que vales para el puesto … libertad. Creo que es justo para ambas partes.
Un abrazo
Erika Martin
21 junio, 2015 @ 20:11
Hi Paula,
I agree with you. That experience should have been a complete mess. Fecal point is a brilliant definition.
Thank you for sharing your experiences. I always die for laughter with your humor touch.
Enjoy a lot and have fun this week with Cindy during the mini-travel
Hugs
Manu cueva
22 junio, 2015 @ 09:40
Muy bueno casi nadie se atreve a contar tanta verdad eres muy grande.
Oscar Bustamante Matías
22 junio, 2015 @ 09:42
Qué grande eres Erika. Un truco muy bueno. Lo que no sé es cómo no denunciaron a esa empresa de sinvergüenzas. Besitos
Notas aparte
23 junio, 2015 @ 09:00
Hola, Erika. La verdad es que algunas empresas se curran mucho que sus empleados les abandonen y se conviertan en una donde nadie quiera trabajar, además de decirse publicamente las condiciones laborales en las que tienen que trabajar alguno de ellos.
Lo del fax me lo apunto… nunca se sabe 😉
El post me ha enganchado. Un abrazo
María Campra Peláez
23 junio, 2015 @ 16:59
Genial. Me ha encantado. Es surrealista alguno de los trabajos que hay en España. Y encima tienes que estar agradecido por tenerlo. Lo de la fumigación sin ventilación me ha llegado al alma. Menos mal que no volviste. Un abrazo.
Erika Martin
23 junio, 2015 @ 17:36
Hola Oscar,
no se nos ocurrió denunciar. Lo que queríamos era salir de allí antes de que nos fumigaran a nosotros también.
Pero en esta mala experiencia, aprendí algo bueno, el truco del fax jajaja
Besitos
Erika Martin
23 junio, 2015 @ 17:37
Muchas gracias, Manu 🙂
Erika Martin
23 junio, 2015 @ 17:42
Desde luego, Mara, parece que hay empresas en donde su máximo objetivo es desmotivar a los empleados para dimitan y así de paso ahorrarse el finiquito. Supongo que habrá otras donde los cuiden. Aunque encontrar una así es casi tan difícil como que te toque la Primitiva.
Claro, apúntate lo del fax por si acaso un día lo necesitas jejeje
Un beso muy grande
Erika Martin
23 junio, 2015 @ 17:46
Hola María,
has dado en el clavo. Hay que estar agradecido por tener trabajo pero no si es uno de estos surrealista. Imposible regresar a ese antro.
Un super abrazo
Erika Martin
24 junio, 2015 @ 17:23
Hola Felipe,
ahí se quedaron con los caza-fantasmas y las cucarachas jaja
Lo del fax, de verdad, que es un truco muy bueno. Seguro que ayuda a muchos.
¡Un gran abrazo para ti!
Muchas gracias por venir 🙂
Erika Martin
24 junio, 2015 @ 17:29
¡¡Bienvenida a Anécdotas de Secretarias, Marta!!
Espero que en la librería no tengáis bichos de estos, que con la gente ya hay más que suficiente ¿no? jaja Tu también tienes una nueva seguidora. Me han encantado tus odios confesables en el trabajo.
Un besito, guapa
Felipe Rodríguez
24 junio, 2015 @ 17:10
Lo de querer fumigar con ustedes dentro ya fue el colmo, nada como una renuncia masiva para solucionarlo.
Estoy seguro que el consejo del fax ayudará a muchos ja ja ja
¡Un abrazo!
Marta B
24 junio, 2015 @ 17:11
hola!!! te he descubierto a traves del blog de chelo, y me ha encantado tu blog!!! me he reido bastante con tus anecdotas jejej y tambien he flipado un poco :O cucarachas!!! yo no puedo con esos bichos, si veo uno en donde trabajo dejo el trabajo jajaja y mas aun si corretean por mi mesa :O
tienes una nueva seguidora!!
un besito!!!
Erika Martin
24 junio, 2015 @ 20:49
sí, mentimos todos por igual 🙂
¡Muchas felicidades por tu cumple-blog!
Besos
El desvan de vicensi
24 junio, 2015 @ 20:47
Vaya vaya yo creo que quedamos empate. Un beso
Luis de la Rosa
26 junio, 2015 @ 14:35
Genial tu entrada. No solo muy bien escrita sino que tiene muuucha chicha. Sí, vivimos en un país en que todos somos super vocacionales, supermotivados… y superchanchulleros y superfalsos. Engañas porque te engañaron, incumplen la ley porque tú estás por debajo y no te conviene quejarte, solo queda el recurso de mentir. Sí, algo de esto también se ve en institutos, que es el campo en que yo trabajo, y sobre todo si son institutos de ciudad; en el campo ocurre menos. Y eso que yo me pregunto ¿realmente es necesario en la administración pública ese grado de hipocresía y competición?
Bueno, reitero: genial este post (y ahora que no estoy en el trabajo, no es por hipocresía ;-))
Poeta Borracho
26 junio, 2015 @ 14:36
Pero al margen de los jefes, la empresa fumigadora tampoco sería muy sería, pues ellos saben de sobra que el producto es tóxico y que no puede entrar en contacto con la gente. Al menos la empresas serias lo saben.
Y bueno, respecto al resto del post, me ha hecho gracia la italiana en plan "en Italia también hay, pero no son tan grandes" mola porque es también una manera de reflejar que Italia es parecida, que son muy bananeros en contraste a los otros que se asombran de la situación y les parece increible. Welcome to Spain.
Saludos.
Erika Martin
26 junio, 2015 @ 19:38
Hola Poeta Borracho,
efectivamente, cualquier persona (no ya empresas) sabe que los productos utilizados para fumigar son tóxicos.
Es genial trabajar con gente de otros países, aprendes muchas cosas de ellos y de sus países. Y, claro, ellos aprenden y se sorprenden de nuestras cosas jaja Welcome tu Spain!
Saludos
Erika Martin
26 junio, 2015 @ 19:46
Hola Luis,
es la pescadilla que se muerde la cola. Maquillas el curriculum para conseguir una entrevista y el reclutador no te cuenta toda la verdad para que aceptes la oferta. Lo malo es que nadie lo reconoce y menos aún las empresas.
A todos esos super-algo, habría que añadir los super-enchufados jajaja
Es un enorme honor que un gran escritor como tu me diga que mi entrada está muy bien escrita. Ya me has alegrado el fin de semana. Mil gracias.
No estás en el trabajo por vacaciones supongo ¿no?
Un beso
Luis de la Rosa
26 junio, 2015 @ 23:03
Pues no, en realidad tengo que ir al trabajo hasta el 30. Lo digo no sea que así cunda aún más la idea de que los profes no hacemos nada, que en la mayoría de los casos es muy injusta. Ayer algo me sentó mal y estuve con el estómago chungo, por eso estaba en casa a esa hora. Ahora ya estoy mejor.
Muchas gracias por tus palabras. Un beso.