Recepcionistas: las grandes olvidadas por todos en la empresa
Si las secretarias estamos poco reconocidas y valoradas en la empresa, las recepcionistas directamente no existen.
Debe ser porque como están abajo del todo en el organigrama, nadie se acuerda de ellas.
Y cuando alguien se da cuenta de que son algo más que un elemento decorativo en la entrada de la oficina, entonces las toma por lelas.
Solo se las echa de menos el día que caen enfermas y no pueden ir a trabajar. Entonces ocurre el drama y la tragedia en la oficina.
Porque, claro, la centralita no puede quedarse sin ser atendida y alguien tiene que estar detrás del mostrador para abrir la puerta y recibir a las visitas.
La tragedia viene porque nadie quiere ocupar ese puesto durante unas horas. Ni siquiera algunas secretarias. Es como si fuera humillante.
Los méritos profesionales de las recepcionistas
Aspecto físico
Vale, el aspecto físico no es un mérito profesional, sino genético, jajaja.
Sin embargo, generalmente se contrata a chicas jóvenes y guapillas para causar buena impresión al que entra por la puerta de la oficina.
¿Qué pensarías si pusieran en ese puesto a una señora mayor, poco agraciada o con sobrepeso? Nada positivo ¿verdad? que te conozco y sé que eres superficial, jajaja
La cruz de ser atractiva
Esto del aspecto físico es una lata porque las recepcionistas tienen que aguantar a muchos pesados (compañeros de trabajo, proveedores, visitas) que se ponen a hablar con ellas para ligar. Son más cansinos que el típico playboy plasta de discoteca.
Te puede hacer gracia la situación. Pero debes saber las recepcionistas se llevan buenas regañinas por tener el mostrador lleno de moscones revoloteando.
Sí, amigo moscón, se las regaña por no estar concentradas haciendo su trabajo y porque, que haya más gente en el mostrador que en un vagón de metro a las 8:00 AM, causa mala impresión a cualquiera que entre por la puerta.
He de decir que tampoco es fácil dar largas a estos pesados.
Algunos son muy insistentes y aunque les ignores, no les mires, ni les hables, siguen ahí dando el coñazo porque no terminan de creerse que la tontita de recepción no esté colada por sus huesos.
Ahora ya entiendes por qué he puesto el aspecto físico como mérito profesional ¿verdad?
Son todólogas
Sorprendentemente estos elementos decorativos vivientes de la oficina, realizan tareas que requieren el uso del cerebro y que encima son productivas ¡Wow!
Son especialistas en hacer de todo:
- Atienden llamadas
- Reciben visitas
- Preparan salas de reuniones
- Llevan el control del material de oficina
- Hacen reservas de viajes (hoteles, vuelos, etc)
- Gestionan los pedidos: tramitación, albaranes, facturación, seguimiento del pago
- Muchas llevan la contabilidad de la empresa cuando están en una PYME
- Otras incluso son las encargadas de actualizar los contenidos de la web corporativa y de gestionar las redes sociales
Sí, las recepcionistas son todólogas.
A pesar de eso, todo el mundo se piensa que es un trabajo tan simple y básico como el de secretaria virtual 🙁
Como si atender la llamada de un cliente enfadado, con una sonrisa en la boca y sin perder los nervios, fuera una tontería.
O como si reprimir los impulsos asesinos, cuando atiendes la visita de un prepotente, fuera una habilidad innata que tiene todo el mundo.
Lectura recomendada: La tarjeta de identificación de las visitas y empleados
Salario
Como estás en el último escalón del organigrama, tu salario es el más bajo de toda la empresa.
Si eres recepcionista, piensa que hay gente que está peor que tú.
Los becarios (otros olvidados en la empresa) trabajan gratis, haciendo lo mismo que los demás compañeros de departamento y aún así los de RRHH piensan que son empleados felices y súper agradecidos por la gran experiencia profesional que están adquiriendo en una empresa líder en el sector a nivel mundial.
Horario y jornada laboral
Las recepcionistas se pasan todo el día en la oficina y en algunos casos, el servicio es más amplio que el del resto de sus compañeros. Entiéndeme, no se pueden perder llamadas.
No olvidemos que siempre hay clientes que llama a última hora del día, de madrugada, un sábado por la tarde e incluso los domingos.
El turno de trabajo
Así que en muchas empresas hay turnos de trabajo:
◉ Horario de mañana: entras antes del amanecer y sales a la hora del almuerzo. Lo bueno es que tienes la tarde libre.
◉ Horario de tarde: que sueles entrar sobre las 13:00 y pringas hasta que se pone el sol e incluso hasta después de que el gran jefe se haya ido a su casa.
Lectura recomendada: ¿qué hacen los directivos todo el día encerrados en sus despachos?
Con el turno de tarde no tienes vida personal.
Si vives en una ciudad grande, en la tardas una hora en llegar a la oficina, tendrás que salir de casa a media mañana para llegar a tu hora al trabajo.
Como sales de trabajar a hacia las 20:00 – 21:00 horas, cuando llegas a tu casa, cenas y te acuestas.
El horario de tarde es tan malo que no te permite apuntarte a un curso en una academia y tampoco ir a la universidad porque las clases de mañana acaban a las 14:00.
Descansos
Otra desventaja de este puesto es que, cuando te levantas para ir al vending o al servicio, tienes que avisar para que alguien esté pendiente de la puerta.
Está comprobado que en cuanto te ausentas 2 minutos del sitio:
⊗ Llegan todos los mensajeros estresados que no pueden esperar a que vuelvas y les pongas el sello en el albarán porque tienen la furgoneta aparcada en doble fila.
⊗ Llega esa visita súper importante que el gran jefe está esperando porque se cree que va a cerrar un trato comercial que convertirá a la empresa en líder del mundo mundial y parte del universo.
⊗ La centralita se colapsa con las llamadas de clientes enfadados que si no respondes ya, corren a incendiar las redes sociales hablando mal de la empresa.
Bajas por enfermedad y vacaciones
Te lo comenté más arriba. El día que falta la recepcionista y la centralita no para de sonar, es cuando todo el mundo de acuerda de ella.
◎ Si es una ausencia de unas horas, habrá tragedia porque nadie querrá ocupar su puesto, haciendo de telefonista ni estar detrás del mostrador recibiendo visitas. Para algunos es humillante estar realizar unas tareas tan básicas y simples.
◎ Si es una baja por enfermedad de unos días, su compañera tendrá que doblar el turno y trabajar más horas que en un operario de una fábrica del siglo XVIII.
◎ Si se va de vacaciones, la tragedia la tiene RRHH porque tendrá que contratar a alguien que cubra la ausencia de la recepcionista durante unas semanas. Imagínate: publicar la oferta, hacer entrevistas, seleccionar a la candidata y luego no responder al resto de personas que fueron a la entrevista.
Lectura recomendada: El silencio tras la entrevista de trabajo
Formación
Como parece que cualquiera puede ejercer este trabajo ¿para qué va a ser necesaria la formación?
Muchas empresas publican ofertas de empleo en donde ponen que «no es necesaria ni formación ni experiencia»
La centralita
Ya me gustaría a mí ver cómo manejas todos los botoncitos y lucecitas de la centralita, y cómo transfieres o recuperas llamadas.
Esto además es algo que curiosamente no te explican en ninguna empresa. Ojo, que en cada empresa tienen una centralita distinta. Con suerte, te sueltan el manual de 200 páginas para que te lo leas y ya está.
Los equipos técnologicos de las salas de reuniones
Algo parecido pasa los equipos de las salas de reuniones: el teléfono de multiconferencia, el proyector, la configuración de la videoconferencia … terminas siendo experta en telecomunicaciones.
Lectura recomendada: Organización logística de las reuniones
Protocolo empresarial
¿Protocolo? ¿eso no es lo de saludar al Rey y colocar banderas? ¿Para qué se necesita en un empresa?
Pues mira, te diré que el protocolo empresarial es una herramienta vital en la imagen corporativa. Da la casualidad que Recepción es la puerta de entrada a tu negocio.
Recepción es la primera cara que ve alguien cuando llega a tu empresa y la primera voz que escucha cuando llama por teléfono.
Por tanto, es indispensable que tu recepcionista sepa cómo saludar a tus visitas y acompañarlas a la sala reuniones. Igual que es fundamental que sepa cómo responder llamadas telefónicas.
Se llama atención al cliente. Ese servicio en el que si la pifias los pierdes, dejas tener ingresos e incluso puedes sufrir una crisis reputacional en las redes sociales.
Sí, hijo, sí. El protocolo telefónico es tan delicado para la gestión de clientes que me ha dado para escribir un eBook de 53 páginas.
Contabilidad y facturación
Para meter a alguien a picar facturas en el departamento financiero, se exige que sea licenciado cum laude y honoris causa en ADE, así como que hable inglés, chino y arameo (que por pedir que no quede, jajaja)
Sin embargo, en muchas empresas esta tarea la hacen las recepcionistas. Cuando la contabilidad se lleva desde la mesa de recepción, con que sepas sumar y restar es más que suficiente.
De verdad, no entiendo nada.
Nunca irás a …
Si eres recepcionista, ya te habrás dado cuenta que tú nunca vas a:
- cursos para empleados
- Town halls
- eventos para empleados fuera de la oficina organizados en horas de trabajo
- la cena de navidad de la empresa si estás contratada por ETT
No es que RRHH se olvide de ti (dicho con sarcasmo), es que alguien tiene que quedarse de guardia en la oficina y responder todas las llamadas entrantes.
¿Has trabajado alguna vez de recepcionista todóloga?
¿Te ha pasado algo de lo que he contado en el post?
¿Tienes alguna anécdota más que añadir?
Este post está escrito a petición de una todóloga mexicana que prefiere quedarse en el anonimato.
Imagen destacada del post: Recepción oficina vía Shutterstock
9 junio, 2017 @ 19:19
Buenas tardes,
Yo nunca he trabajado de recepcionista, pero si he tratado mucho con las de la anterior empresa donde estaba, de hecho una de ellas es amiga, y he de decir que estoy totalmente de acuerdo con lo que dices.
Creo que algunas empresas no son conscientes de que la primera imagen que tiene una persona cuando entra a una empresa es la recepción y es lo que más tenemos que cuidar, pues es nuestro primer contacto con el exterior. No hablo del físico del trabajador, sino más bien de su estado emocional, que se sienta uno más en la empresa y no el último en un esquema. Y cuidar también el nivel de estrés al que son sometidos.
Me entretienen mucho tus historias, me gusta pasarme a leerte.
¡Que tengas un buen finde! ?
9 junio, 2017 @ 22:12
Hola María José,
estoy completamente de acuerdo contigo. Es una pena que algunas empresas no lo vean así, o mejor dicho no valoren este puesto como se merece.
Personalmente pienso que el físico o la edad no tienen por qué ser una razón de peso para contratar una recepcionista, sino el saber estar, el don de gentes y saber trabajar en condiciones de alto estrés.
Gracias ☺️ A mi también me encanta leerte. El post del otro día de los inmails fue super interesante porque desconocía totalmente ese tema.
¡Muy buen fin de semana para ti también! ?
9 junio, 2017 @ 21:14
Es de los peores puestos que hay en una empresa, sin duda de ningún género.
Y si además tienes que llevar también la centralita telefónica con todas las extensiones, aun peor.
Lovely weekend.
9 junio, 2017 @ 22:14
Lo de la centralita es una locura, RamRock, sobre todo cuando no hay nadie en la ofi y todos han desviado sus extensiones .
Lovely weekend!
9 junio, 2017 @ 22:09
Todo mi respeto para el personal del front desk… Yo alguna vez fui la «pringada» que las sustituia en mi última empresa y, de verdad que es horrible. Eso sí, muy amablemente, me explicaron como funcionaba todo aunque tuvieron que quedarse más allá de su hora habitual, luego descubrí que salir más tarde es lo típico, porque siempre hay un cliente que llama 1 minuto antes del cierre…
El tema de los moscones es de lo peor y de lo más molesto del puesto: hay clientes que se creen que les tienes que reir todas las gracias y seguirles el rollo solo porque son eso clientes.
Saludos
9 junio, 2017 @ 23:00
Hola María,
qué bueno, no sabía yo que te había tocado ser la sustituta «pringada» en tu última empresa. Al menos te explicaron cómo funcionaba la maldita centralita. Ahí tuviste suerte 😉
El cliente del último minuto antes de salir, nunca falla. Creo que se llama Sr. Murphy, jaja
Lo de los moscones es terrible. Son como los chulo-piscinas en verano. Y encima tienes que aguantarles con la sonrisa congelada en la cara (por no mandarles a la mierda) pero ellos entienden que es porque te tienen en el bote y siguen insistiendo. Qué cansinos!
Un abrazo!
10 junio, 2017 @ 00:05
Hola, nos has quitado a todos las ganas de ser recepcionistas, jejeje.
Besos y como siempre es genial leerte, me río mucho aunque toques temas serios.
10 junio, 2017 @ 09:31
Hola Marigem,
hombre, tampoco es para tanto. Siempre he pensado que el puesto de recepcionista te da muchas tablas en el trato con personas, es decir, para aprender el «don de gentes». Piensa que muchas secretarias empiezan su carrera hacia la cima del organigrama desde el puesto de Recepción.
A estos temas serios siempre hay que darles un toque de humor.
Buen finde!
10 junio, 2017 @ 01:17
Hola Erika,
Barriendo para casa, tengo que decir que ser recepcionista y al mismo tiempo gestionar las redes sociales de una empresa es misión imposible si se quieren hacer bien ambas cosas.
Muchas empresas aún no lo han entendido, y lo hacen porque se ahorran un sueldo y «¡bah! Solo hay que publicar unas cuantas cosillas en el Facebook, eso lo puede hacer cualquiera», pero son tareas que conllevan tanto esfuerzo y tiempo individualmente que es imposible que las ejerza de forma aceptable una única persona. Creo por todo esto, y a mi pesar, que la figura del Community Manager en muchas empresas se considera inferior al injustamente menospreciado puesto de Recepcionista (con mayúscula), ¡y ya es decir!
Muchas gracias por dejarme opinar y felicidades por tu blog ?
10 junio, 2017 @ 09:45
¡Hola!
es tal y como lo cuentas.
No se pueden ejercer dos puestos de trabajo al mismo tiempo, porque la gente no es superwoman o superman.
Cierto es que cualquiera puede publicar 4 cosillas en Facebook, pero no todo el mundo está capacitado para redactar artículos, hacer una estrategia de contenidos y de marketing digital, usar herramientas para programar publicaciones, hacer seguimiento estadístico de todo, responder menciones o comentarios (con lo que ello supone en tema atención al cliente vía digital o gestión de una crisis de reputación) y demás funciones que tienen los CM.
Es una pena que la figura del CM tampoco esté valorada y retribuida como se merece en estos tiempos de transformación digital.
Gracias a ti por aportar tu granito de arena con tu opinión ?
¡Buen finde!
10 junio, 2017 @ 16:14
¡Y tanto que es la gran olvidada! Es un pilar muy importante al que no se le da el reconocimiento y prestigio que tiene. Sólo cuando falta… Una pena que no se valore esta profesión, como tantas otras.
¡Un beso Erika! Feliz fin de semana 🙂
11 junio, 2017 @ 09:00
Es así, Patricia, en muchas ocasiones solo echamos de menos a nuestras compañeras de Recepción, cuando no están en la oficina (vacaciones, enfermedad, etc)
Muy feliz domingo, besos
10 junio, 2017 @ 19:41
Es cierto que se valora cuando no están, así de tontos somos y aunque algunos no lo entiendan son con frecuencia la primera imagen de la empresa y con lo que uno con frecuencia se queda. Da gusto encontrar a buenos profesionales, en la recepción o en cualquier lugar, que hagan bien su trabajo, que te reciban con un educado buenos días y que te ayuden con una sonrisa, pues hace el día agradable y tampoco cuesta tanto hacernos el día agradable unos a otros, ¿no?
Un beso y feliz fin de semana
11 junio, 2017 @ 09:05
Hola Conxita,
siempre da gusto tratar con profesionales educados, amables y resolutivos.
Ayudar a alguien con una sonrisa no es nada fácil porque a veces los que estamos al otro lado somos bruscos, groseros, arrogantes … y Recepción se «traga» a muchas personas así. Gente que llama por teléfono y no dice quién es, gente que entra en la oficina y no se presenta en recepción, compañeros que las ningunean por estar abajo del organigrama.
No cuesta nada ser amables los unos con los otros, en eso tienes mucha razón. Sin embargo, hay gente muy borde por ahí suelta, jajaja
Un beso y muy feliz fin de semana para ti también
11 junio, 2017 @ 14:39
Pensaba hacerme recepcionista este verano, pero después de leer esto y pensarlo una vez y media… ¡Mejor lo dejamos como está! Gracias por haberme entretenido con este realista relato del día a día de estas personas.
Un abrazo!!!
11 junio, 2017 @ 21:50
jajaja no, no te metas a recepcionista este verano, Humoreo, mejor hazte socorrista de piscina que al menos te puedes dar un chapuzón de vez en cuando 😉
Gracias a ti por leer y comentar.
Un abrazo grande!
12 junio, 2017 @ 18:15
No se te pasa ni una, Erika. Claro que sí, hay que acordarse de esas «todologas» o «todologos» (como hay en mi centro, que ejercen hasta de doctores ofreciéndote remedios caseros para si te duele esto o lo otro).
Lo que me parece a mí indignante es que les parezca a algunos eso, indignante (valga la redundancia) ejercer sus funciones cuando no están o por cualquier otro motivo.
Yo también admiro su habilidad en la centralita. Está claro que cada uno es profeta en su tierra…
Genial post, ¡un beso!
13 junio, 2017 @ 17:53
jajjaaj sí, es verdad, también son enfermeras y doctores. En mi oficina son las que tienen la llave del botiquín también (que está cerrado porque sino la gente manga las aspirinas, alucina).
Así es, a muchos les parece un insulto ponerse puntualmente en el puesto de la recepcionista, imagina, es que es el puesto más bajo del organigrama y, claro … en fin, qué le vamos a hacer
Gracias 🙂 Otro beso para ti
13 junio, 2017 @ 16:19
Mi primer trabajo fue como recepcionista. Me pasó todo lo que describes (con la excepción del atractivo físico, jajaja), pero lo peor fue el día que TODA la empresa participó de un curso y simulacro de incendios y yo tuve que quedarme atendiendo el teléfono. Total, si me moría en un incendio a quién le iba a importar.
Saludos!
13 junio, 2017 @ 17:49
Alucino con que no te apuntaran a aquel curso y simulacro de incendio, Silvina ¡qué fuerte! Tu morirías en un incendio y ellos arderían en las llamas del infierno 😛
Mil gracias por tu comentario, me alegro de que te hayas sentido identificada con lo que cuento en el post.
Un abrazo!
19 junio, 2017 @ 22:33
Buenas ería,
Ahora comprendo las lloreras a mares de una de las empleadas, recepcionista, de cuando trabajaba de administrativa. Por cierto, siempre estaba al tanto de lo que cobraba todos los departamentos. No lo recordaba pero a mediodía y por las tardes siempre se acumulaba gente en la recepción nunca lo comprendí pero bueno, había un muchacho que no estaba nada mal y pensé que bueno, lo típico, intentaba ligarse a la pobre. Como si no tuviera suficiente con las llamadas Jajajaja y otra cosa nunca había caído en todo lo que tiene que hacer una recepcionista secretaria bueno yo lo máximo con el maldito escanee que en mi época era más viejo que el año del catapum. Un ruido… Una lentitud… ? ? ?. Tenía hasta pesadillas con el escanear en serio no es coña. Le cogí manía porque precisamente a mi me había tocado el viejo. Bueno, como anécdota no está mal Jajajaja ¡qué cosas! Como siempre una buena entrada.
20 junio, 2017 @ 16:02
Hola Keren,
¿Y cómo se enteraba de los sueldos de todos? jaja espero que no los fuera comentando por ahí porque este es un tema que genera mucho mal rollo entre compañeros.
Por las mañanas es complicado ir a ligar con Recepción porque entran muchas llamadas pero a partir del mediodía y por la tarde, la centralita está más tranquila y siempre se puede ir a intentar «lanzar la caña» jajaja
¿Las recepcionistas escanean? Mira, esto lo desconocía. En todas las empresas por las que he pasado, esta tarea era del becario. Tienes razón, es para tener pesadillas con el chisme jajaja En mis tiempos de prácticas me pasé una buena temporada con el escáner y enviando faxes (que no se había inventado el email todavía).
Muy bueno tu comentario, también me has traído recuerdos a la cabeza.
Un abrazo
20 junio, 2017 @ 20:48
A ver si me deja contestar ahora.
Yo, era administrativa , bueno, secretaria pero bueno, no directa del jefe. Ella era la recepcionista. En el trabajo más o menos sabíamos todos los sectores lo que cobraban pero una aproximación. mi tarea era la escanear y archivar , en alguna ocasión tuve que ir a otra empresa a colaborar por que estaban hasta los topes. ( las cosas del verano) pero no solo a las recepcionistas se las miran por el fisico e impresión. cuando estaba delgada me daban mejor trato. quitando lo dificil y que te tomen en serio por ser negra. Tuve suerte. Me he reído mucho con la entrada.
19 junio, 2017 @ 23:02
Cuánta razón tienes! Ya sabes el dicho: nunca valoras lo que tienes, hasta que lo pierdes. La recepcionista es la gran olvidada de la empresa.
Un post muy divertido, como siempre, y reivindicativo, aunque me has quitado las ganas de ser recepcionista…
Besicos
20 junio, 2017 @ 15:40
Pues sí, Mary, nunca te das cuenta de lo importante que es una recepcionista hasta que falta y la centralita no para de sonar e iluminarse todos los botoncitos. Vaya locura!
No, no, tú dedícate a lo tuyo, que se te da muy bien
Un besote grande
22 junio, 2017 @ 23:01
Hola hermosa!! Tu gracia para escribir es única 🙂 Realmente siempre fueron mal valorados los recepcionistas por lo menos ya no tienen que atender el teléfono constantemente!! Me da gracia que sigan buscando muñequitas para la recepción jajaja Pasaba lo mismo en las lineas aereas tenian que tener las medidas de una miss universo y si miras ahora hay algunas que dan miedo jeje Aquí como en todo el planeta, tienen el sueldo mas bajo y el sueño de ser gerente que, nunca lo pierden!
Que tengas unos días hemosos y divertidos!! Un abrazo, besitos
24 junio, 2017 @ 11:59
Hola Mirta!
es verdad, las azafatas son otras a las que se las selecciona por el físico. Claro que a veces no se sabe muy bien cuáles son los criterios, como dices, algunas dan miedo bien por el aspecto, bien por la cara de amargadas que tienen jajaja
Por aquí estamos desintegrándonos de calor. Por el día superamos los 40º y por la noche no bajamos de los 20º ¡Cosas del verano! Espero que no estés pasando mucho frío por tu tierra.
Disfruta tu también el fin de semana.
Un abrazo muy gordo y muchos besos
29 junio, 2017 @ 12:23
Estuve visitando al familia , el calor es impresionante y a mi que no me gusta para nada jajaja Que te sea leve están bravas las temperaturas cuidate!!!! Un besazo
30 junio, 2017 @ 15:57
Esta semana han caído un poco las temperaturas ¡menos mal! estábamos a punto de desintegrarnos.
Espero que hayas disfrutado mucho la visita a tu familia.
Un besazo!
30 junio, 2017 @ 12:34
Ay, por favor, acabo de deprimirme mucho y al mismo tiempo me siento comprendida POR FIN! Currando de recepcionista llevo más de diez años, de una empresa a otra y tiro porque me toca… En varias (ojo, ¡varias!) tenía un teléfono inalámbrico donde tenía que desviar la centralita para ir al baño, porque como no se puede perder ni una llamada, pues ya si eso contestas mientras cortas el chorrillo para que no se escuche y luego terminas (si la siguiente llamada te deja). Y por supuesto cuando vuelves en un minuto siempre hay alguno que «es que como no estabas…», eso siempre que no se te haya metido un mensajero estresado hasta la cocina al grito de «hola?? hola???» porque llevas 60 segundos fuera de tu sitio.
Me ha encantado leerte! 🙂 No conocía esta página
30 junio, 2017 @ 15:22
Hola Mónica ¡bienvenida al blog!
Habrás vivido, visto y oído de todo en tus 10 años como recepcionista.
jajaaj qué bueno lo del mensajero que entra hasta en la cocina porque no puede esperar. Joer, que solo llevas 1 minuto fuera del sitio ¡qué cansinos! jajaja
En cuanto al teléfono inalámbrico, ni que fuera a quebrar la empresa por perder una llamada o dejar mensaje en el contestador ? Te entiendo perfectamente en este punto. Si tienes tiempo, te sugiero que leas este post … el teléfono sin cables definitivamente es un invento del demonio.
Me alegro de que te haya gustado leerme.
Feliz fin de semana!
10 julio, 2017 @ 23:07
En mi antiguo trabajo, además de hacer todo eso, también tenía que hacer de mantenimiento cuando los ordenadores colapsaban, de limpieza cuando iban padres con sus hijos y pegaban las manos en los cristales, o derramaban cosas en el suelo y además siempre me tocaba sustituir a los profesores cuando faltaban (teléfono inalámbrico en mano).
11 julio, 2017 @ 09:20
Hola Mely,
deduzco por tu comentario que trabajabas en un colegio o una guardería ¿me equivoco?
Alucino con todo lo que te tocaba hacer, especialmente con lo de sustituir a los profesores. Para que luego la gente se piense que no se necesita formación para desempeñar el trabajo de recepcionista.
Espero que donde estés ahora no te toque hacer de informática, señora de la limpieza y de más.
Gracias por compartir tu experiencia.
Un abrazo!
22 agosto, 2017 @ 11:19
Es una pena que la recepcionista sea considerada en muchos sitios «la portera» como si fuera menos persona. Mentalidad arcaica que tienen jóvenes y mayores, hombre y mujeres por igual. Es triste, pero pasa. Besitos
22 agosto, 2017 @ 18:42
… e incluso portera es mucho, Óscar. Hay gente que se piensa que son un florero o un cuadro.
Como bien dices, mentalidad arcaica sin importar edad o género.
Besos
20 enero, 2018 @ 06:08
más bien la pregunta sería que no me ha pasado? jajaja ??♀️? pues si es un cargo muy lindo pero complicado; Es un hecho que a las recepcionistas nos menosprecian mucho ?????
20 enero, 2018 @ 11:14
Habrás vivido todo tipo de situaciones surrealistas como recepcionista, Janet. Y qué pena que os menosprecien tanto, sois pieza clave en la empresa
5 octubre, 2018 @ 12:50
Uff llego un poco tarde al post pero necesito desahogarme ?
Soy recepcionista, aunque empiezo a avergonzarme de mi trabajo porque para el resto soy la chacha de la oficina.
Soy esa a la que se creen el derecho de venir y decirle: hazme un café (hijo de p… vete a la cocina y háztelo tú)
Si llaman les dices que estoy en una reunión y me dejas nota (me voy con mis amigas al brunch, que no se entere el jefe).
Soy a la que le dicen: llegaré 5 min tarde, retrásame las citas (y no se presentan en todo el día y no sabes que decirle a los clientes ni a los jefes)
Soy a la que nunca invitan a la cena de empresa de Navidad, porque claro, alguien tiene que quedarse.
Soy a la que todos miran por encima del hombro: compañeros y clientes y la tratan como a una criada.
Soy la que limpia la mierda de perro que alguien pisó y dejó perdida la moqueta.
Soy la que tiene 30min para comer (y cerca del teléfono) y mis compañeros tienen 2h.
Soy la que no puede irse de vacaciones si no encuentran sustituta.
La que sí o sí tiene que venir más pintada y maqueada que un picaso a trabajar.
Soy ese “informático comodín” cuando no arranca el Windows o se estropea la impresora.
Soy la que se come el marrón si se mueren las plantas (a este paso me saco la carrera de botánica), la que mandan a hacer los recados de todo el mundo (me han llegado a mandar a comprar un juguete para el regalo de cumpleaños del sobrino de una amiga de una empleada ?)…
Y ahora que he decidido estudiar derecho porque no aguanto más y aspiro a salir de este agujero al que me llevó estudiar ADE, se han enterado y me hacen la vida imposible porque dicen que no tengo espíritu de equipo y les quiero abandonar… wtf?!
6 octubre, 2018 @ 20:14
Hola Aitana,
no llegas tarde al post, porque aunque lo publiqué hace tiempo, nada ha cambiado. Las recepcionistas seguís siendo las grandes olvidadas de la empresa. Tu comentario es el mejor testimonio de ello.
Siento mucho que en tu empresa te traten como la chacha, el comodín y la recadera. Haces bien en estudiar ADE para salir del agujero y aspirar a algo más. El puesto de recepcionista quema mucho precisamente por las faltas de respeto que cuentas en tu comentario y que los demás parecen no darse cuenta.
Ni caso a lo que te dicen, es chantaje emocional. Quizás deberías invitarles a reflexionar sobre los motivos por los que quieres «abandonarles» (¡qué fuerte que te digan eso!)
¡Mucho ánimo, compañera!
28 noviembre, 2018 @ 13:49
Aitana, yo soy a la que le dicen que no hay papel en el baño cuando tenemos un equipo de mantenimiento con una señora para ello, pero como hay que llamarla por teléfono, pues mejor me acerco a la recepcionista. No te sientas humillada, muchas de esas cosas me pasan a mi.